Está muy bien hacer deporte. Junto con una comida equilibrada y hábitos de vida saludables se pueden prevenir enfermedades de diversos tipos. Cuando el gimnasio se vuelve en una obsesión al que se le dedican varias horas al día,  ya deja de ser saludable y se convierte en una enfermedad.  En ocasiones pueden llegar a usar anabolizantes para desarrollar más  y más rápido los músculos, siendo muy peligrosos para la salud, por ejemplo, derrames, enfermedades graves del riñón, entre otras. Todas las personas por su morfología no pueden se musculitos ni tener una tableta en la barriga. Intervienen muchos factores. Tampoco por ello hay que pasarse al otro extremo y caer en una obesidad importante que, también sería una enfermedad.